Habló la justicia: lo que provocó la muerte de Miriam Oesterreicher fue una mala praxis médica

Así lo dio a conocer su hermana Elizabeth Vilma Oesterreicher, quien anunció a través de sus redes sociales que fue condenado el médico cirujano responsable de la intervención quirúrgica que derivó en la muerte de Miriam, a partir de dañarle la aorta en el proceso de intervención por una hernia de hiato.

Tres años de prisión en suspenso y 6 años de inhabilitación para el Dr. Ricardo Jorge González Boix. El médico cirujano tiene actualmente 72 años y seguía realizando intervenciones quirúrgicas hasta esta sentencia.

Escribió Elizabeth, en las últimas horas en su perfil de Facebook:

“En el 2019, expresaba que el tiempo me dará la razón, en el sentido que tu fallecimiento fue por una imprudencia del cirujano y no otras causas que quisieron asentar para que tu muerte quede impune. El juicio oral y público realizado en febrero de este año, por el Tribunal N° 12 de Capital Federal, me dio la certeza de mi afirmación, condenando en esa instancia al cirujano.

Hoy son 6 años que ya no te tenemos aquí y como todos los días TE EXTRAÑAMOS. En lo particular fuiste y sos mi Norte para muchos temas que compartimos. ¡Un abrazo desde mis sueños y besos al cielo hermanita!”.

Lo que sigue a continuación es la nota publicada en La Nueva Radio Suárez el 18 de abril del 2018:

Consternación por el inesperado fallecimiento de Miriam Soledad Oesterreicher

Fue sometida a una intervención quirúrgica por diagnostico hernia de hiato y falleció en el quirófano por un daño en la aorta, que le provocó un paro cardíaco. La presunta mala praxis que se llevó a cabo en la clínica Santa Isabel de la ciudad de Buenos Aires suma una angustia mayor a este inesperado desenlace. Sus restos fueron inhumados en la tarde del jueves en el Cementerio Parque de Paz.

Una dolorosa circunstancia se encuentra atravesando la familia de Miriam Soledad Oesterreicher, fallecida a los 44 años de edad en la tarde del miércoles en la ciudad de Buenos Aires, cuando era sometida a una intervención quirúrgica en la Clínica Santa Isabel de la calle Directorio al 2000 con el diagnostico de hernia de hiato, con lo cual los profesionales habían adelantado que sería un procedimiento que no demandaría más de una hora.

Viajó con toda la esperanza de superar rápidamente la dolencia que la afectaba y lo hizo en compañía de su hermana Elizabeth. Se internó, fue trasladada al quirófano y fueron pasando varias horas hasta que de pronto aparece un médico para informarle a su hermana, que aguardaba con la angustia imaginable, las novedades, expresándole que la situación estaba complicada y la paciente había hecho un paro cardíaco.

Fueron pasando los minutos y nuevamente un profesional tiene la dolorosa misión de comunicarle al familiar que lamentablemente fue imposible sacarla del paro y había fallecido.

En consecuencia, todo hace presumir que Miriam fue víctima de una mala praxis médica y las evidencias se confirman con la certificación de defunción que le fue expedida a su hermana en la que se consignó "Shock Hipovolémico", "Lesión en la arteria aorta".

Elizabeth con toda desolación, encontrándose fuera de Coronel Suárez, en un lugar infrecuente para sus actividades, debió afrontar penosamente una situación traumática, encargarse de los trámites del traslado con el servicio fúnebre correspondiente y la difícil realidad de que su hermana había fallecido, por lo cual debía poner en conocimiento de sus padres y hermanos semejante noticia.

Los restos de Miriam fueron velados en la Cooperativa Eléctrica del Pueblo San José, recibiendo sepultura en la tarde del jueves en el Cementerio Parque de Paz de nuestra ciudad, donde ha quedado la clara demostración de que nuevamente un episodio negligente en pleno proceso quirúrgico termina con la vida de una joven integrante de una familia conocida de nuestro medio, con domicilio en calle Boulogne Sur Mer 1350.

Su padre con todo el dolor del alma tuvo palaras elocuentes al momento de definir la situación: “fue a operarse a Buenos Aires y me traen la hija muerta”.

No hay más palabras que agregar.